Infinity Ward y Activision continúan afinando su último gran éxito, Call of Duty: Modern Warfare, que salió a la venta el pasado 25 de octubre para PS4, Xbox One y PC. La producción acaba de lanzar la versión 1.07 con muchas novedades, entre las que se destacan dos nuevos mapas y un modo de juego inédito en la franquicia.

Con respecto a los mapas, Krovnik Farmland se añade a Guerra Terrestre, mientras que Shoot House es el elegido para el multijugador.
Además, se añade el modo Hardpoint, una modalidad clásica que ya ha estado presente en otros videojuego de la franquicia y que invita al jugador a asegurar un punto concreto del mapa y a salvaguardarlo de los enemigos.

El resto de los cambios que introdujo el parche

Además de los contenidos gratuitos contemplados en la hoja de ruta de la compañía, esta actualización incluye algunas mejoras, como por ejemplo, arreglos destinados a prevenir crashes y a mejorar la estabilidad en todas las plataformas, que inciden en el rendimiento.

También fueron solucionados unos cuantos bugs que provocaban que algunas rachas o mejoras de campo se salieran de los límites. Entre los cambios, corrigieron las colisiones en los mapas, mientras que el sprint y la velocidad del sprint táctico se ha modificado para que sea idéntico al de la beta.

En lo que se refiere al equilibrio del juego, las minas claymores fueron las apuntadas por Infinity War. Si disparás contra una de ellas no recibirás daño letal siempre y cuando dispones de vida suficiente. Además, el rango en el que se activan es más reducido.

Por otro lado, los enemigos no escucharán a tu operador llamar a nuestros objetivos, y las llamadas serán escuchadas por los miembros del equipo, pero no por tu propio operador.