Nanica Smitch: cuidado, para el mundo gamer es claro que esto es una falsa Switch pero algún desprevenido puede caer en la trampa

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Las consolas imitadas, falsas, o “truchas” siempre existieron. Basta recordar la época de “el family”, que era un imitación de las consolas de 8 bit de Nintendo, el exitoso Famicom, hasta el día de hoy que tienen un mercado extraño, pero lo tienen. Ahora apareció una que realmente rompe todos los estándares: Nanica Smitch, una cosa bizarrísima que pretende ser una Nintendo Switch pero que tiene el logo de PlayStation bajo la idea de “NanicaStation”.

Sucede que las tiendas se inundaron de imitaciones de NES, de PlayStation y de cualquier consola, aunque lo cierto es que suelen tener en su memoria juegos muy antiguos. Muchas de ellas, de hecho, siguen teniendo las mismas versiones piratas de juegos de 8 bits. Y ahora es el turno de Nintendo Switch.

Desde Twitter nos llega la imagen de una Nintendo Switch pirata, una consola de imitación llamada Nanica Smitch. El modelo está a la venta al menos en bazares colombianos donde se vende por unos 160.000 pesos colombianos (unos 48 dólares). Si nos fijamos en la caja, incluye 800 juegos y una imagen de Super Mario Bros. 3, por lo que es posible que estemos ante la típica emulación de una NES con una cantidad ingente de juegos piratas y versiones adulteradas de clásicos.

Lo normal es que estas imitaciones aparezcan en China y vayan llegando progresivamente a bazares y tiendas de todo el mundo poco a poco.

Sin embargo, la Navidad es un momento especialmente fructífero para este tipo de productos que muchas veces terminan siendo comprados por personas que buscan un regalo de la lista de Papá Noel o los Reyes Magos y adquieren por error y sin conocimiento una de estas consolas piratas en vez del producto real.

Las consolas piratas producen daños por copyright estimados en millones de dólares anuales a compañías como Nintendo y no es de extrañar que se realicen operaciones contra su venta, pues también pueden considerarse fraude al intentar engañar al consumidor despistado.

Por tanto, lo que pare el usuario veterano es una curiosidad y una mala imitación incapaz de producir el engaño, puede tener implicaciones mucho más severas para el consumidor medio y, en fechas como estas, pueden engañar incluso a Papá Noel si va con prisas o si no logra encontrar el producto en la tienda habitual.

Y también, claro, a quien se sienta tentado por la diferencia de precio con respecto al producto real.

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Juan Brodersen

De buenas historias vivimos, y nunca habrá como la de Nintendo. [Periodista. Editor en Clarín, redactor en Revista Brando y The Bubble] [Graduado de Filosofía (UBA - FFyL). Mag. Historia (UTDT)]