En solo 15 días, Garena baneó a más de 1.1 millones de jugadores tramposos de los servidores de Free Fire por usar recursos ilegales para obtener ventajas en el juego.

La suspensión permanente, según la compañía, se produjo tras la identificación de scripts y aplicaciones de terceros utilizadas por jugadores de todo el mundo entre el 16 y el 29 de mayo. “Ese tipo de actitud deshonesta no tiene cabida en nuestro querido Free Fire. Las cuentas que hacen trampas se suspenden permanentemente. Es decir, no hay forma de recuperar el acceso a la cuenta una vez que ha sido suspendida por trampas”, reiteró la empresa.

Además de las prohibiciones y actualizaciones que lo han convertido en el cuarto juego más popular de todos los continentes con 100 millones de players activos por día, Garena ha anunciado que también está trabajando para corregir ciertas vulnerabilidades en el battle royale.