Tras la cancelación de Scalebound, PlatinumGames salió a defender a Microsoft: “Las dos partes fracasaron”

0

La cancelación de Scalebound, uno de los proyectos más ambiciosos de la presente generación de consolas Xbox, impactó al mundo gamer. Aunque inicialmente se pensaba que Microsoft era el principal responsable, el estudio detrás del juego, PlatinumGames, reconoció ahora, en voz de Atsushi Inaba, que ellos también tuvieron parte de la culpa.


En declaraciones a VGC Chronicle, el directivo nipón asegura que no fue “nada fácil” para ellos asumir que esta nueva IP, que iba a ser exclusiva para Xbox One tras su presentación en el E3 2014. La cancelación fue “un fracaso conjunto”, de las dos partes. “Ver a los fans enojarse con Microsoft por la cancelación no fue algo fácil de presenciar. La realidad es que cuando un juego en desarrollo no sale a la venta es porque las dos partes fracasaron”, asegura, restando así parte de la culpa a Microsoft porque no lo considera “justo”.

Atsushi Inaba

Atsushi Inaba, de PlatinumGames.

La autocrítica no se sustenta en las declaraciones de Inaba: “Pienso que hay algunas áreas donde pudimos hacerlo mejor; estoy seguro que hay áreas donde Microsoft como socia editora cree también que pudieron hacerlo mejor. Porque nadie quiere que un juego se cancele”, añade. 

“Obviamente no podemos entrar en detalles, porque hay ciertos acuerdos como desarrolladora. Queremos asegurarnos de que la editora, que nos dio la oportunidad de hacer el juego en primer lugar, no es tratada andrajosamente”. El señor Inaba termina diciendo que “No nos gusta ver que Microsoft toma toda la culpa por parte de la ira de los fans porque el desarrollo de un juego es algo difícil para las dos partes, una lección aprendida para todos, eso es seguro”.

About author

Hernán Mármol

Desde 1986 despuntando el vicio por los fichines. Playland, Sacoa y Fascination fueron mi Jardín de Infantes; la Primaria la hice con el Dinacom y el Family Game; la Secundaria se dividió entre Sega Megadrive y PC. Hoy, la PlayStation 4 es mi mujer y Xbox One, mi amante. Un fundamentalista de los esports.